El Concejo Deliberante de Villa Gobernador Gálvez aprobó a mediados de este año una ordenanza clave para la salud y el bienestar de los animales en la ciudad, que establece la creación de un Consejo Asesor de Bienestar Animal y Promoción Ecológica. Esta decisión surge de las conversaciones y el trabajo arduo de protectores de animales locales, quienes se encuentran desbordados por la compleja demanda relacionada con la salud animal y la contención de mascotas abandonadas.

Aunque el municipio cuenta con un espacio de veterinaria pública, este resulta insuficiente para atender la problemática. La creación del Consejo Asesor tiene como principal objetivo que las propias protectoras, al ser quienes trabajan directamente en el tema, puedan hacer sus propuestas y encontrar soluciones a la situación.

Actualmente, se tiene conocimiento de la existencia de alrededor de cuatro instituciones formalmente constituidas (asociaciones civiles u ONGs) que se dedican al tema. El próximo paso antes de convocar al Consejo es la creación de un registro oficial para estas instituciones. Los requisitos incluyen poder demostrar personalidad jurídica y contar con un mínimo de dos años de trabajo en la temática, asegurando así que el Consejo esté integrado por actores con experiencia comprobada.

Desde el bloque Movimiento Evita, Juan Domingo Brea reconoció que, si bien se buscó, no se ha logrado un diálogo directo con el área de sanidad animal del municipio, pero la demanda de la comunidad y de las instituciones protectoras justifica el avance del proyecto.

La propuesta toma como ejemplo el Consejo Asesor que funciona en Rosario desde hace muchos años, lo que ha derivado en "muy buenas políticas públicas de salud animal" en esa ciudad, incluyendo espacios como el del IMUSA. La idea es replicar un modelo similar en Villa Gobernador Gálvez.

El proyecto ha sido consensuado por todos los bloques del Concejo Deliberante. La conformación definitiva del Consejo se realizará una vez que el registro de instituciones protectoras esté completo.

La recepción de la noticia por parte de los vecinos ha sido muy positiva, lo que evidencia una mayor conciencia y responsabilidad sobre la tenencia de mascotas. También se destacó la creciente sensibilidad ecologista en las nuevas generaciones. La situación de los animales, especialmente perros y gatos, es "desbordante en los barrios", por lo que esta medida es vista con optimismo. Además, se hizo hincapié en que la salud animal es parte intrínseca de la salud humana, y la protección abarca no solo a los animales domésticos sino también a las especies que conviven en la ribera y otros espacios naturales de la ciudad.